Calle dedicada a Lorenzo Armengual de la Mota (1663-1730). Nació en Málaga el 6 de Noviembre de 1663 y fue bautizado en la parroquia de San Juan de los Reyes. Hijo de humildes pescadores, vivía en una casa del barrio del Perchel, donde toda la familia se dedicaba a remendar redes y tener siempre a punto su pequeña jábega. Ayudaba, ya de niño a sus padres en las tareas de la pesca. Eran tan pobres que ni podía ir a la escuela. Tiraba un día de las redes cuando pasó por allí el canónigo Ibáñez Enríquez, magistral de la Catedral. Admirado del carácter resuelto del muchacho, trabó conversación con él. Logró aquel buen canónigo un puesto de colegial para el chaval en el Estudio de Gramática que enía por aula el claustro de la vieja Cateral. Luego le tomó a su servicio y bajo su protección. Pasado el tiempo, el magistral llegó a ser Obispo y más tarde Arzobispo de Zaragoza y a su lado estuvo siempre el joven Lorenzo, que se hizo sacerdote.
Lorenzo llegó a tener una prebenda en la Catedral de Santiago de Compostela. Fue visitador General y Vicario en Zaragoza, de cuya sede fue Obispo auxiliar. En 1707 sería nombrado gobernador del Consejo Real de Hacienda, consejero real y camarista del Supremo de Castilla y aún director de toda la Real Hcienda. En 1714 era uno de los cuatro ministros del gabinete Real y presidente de la Hacienda hasta el año 1717, que fue nombrado Obispo de Cádiz, hasta su muerte en Chiclana, en 1730. También se le concedió el título de marqués de Campo Alegre. Fue además capellán y vicario general de la Real Armada del Mar Océano. Desde Cádiz, nunca se olvidó de Málaga.